Durante mucho tiempo pareciera que la suerte no está de mi lado; aun así, me he permito creer en cada una de las personas, confiar y pensar que al final son buenas, sólo que las circunstancias las hacen ser así.
He conocido diferentes maneras de pensar y he de decir que no todas ellas me han agradado, de hecho muchas de ellas me han irritado bastante. Creo, a ciencia cierta, que son sus actos los que más me han marcado, aunque no me han hecho cambiar mi forma de pensar.
Por un lado encontraba personas "ANIÑADAS", carentes de una forma propia; por otro lado encontraba personas "EGOÍSTAS", aquellas que sólo les preocupaba conseguir sus propios intereses; otras más eran "EGÓLATRAS", pues lo único que deseaban era el simple hecho de que los demás pensaran que ellos son superiores a todos... y por mencionar otros, los "FALSOS", simplemente personas que mentían en todo, y mentían sólo para crear algo fantasioso. No cabe duda que me he encontrado a lo largo o más bien, a lo orto de mi vida, una infinidad de modos de pensar y de actuar.
Soy una persona común como cualquier otra, tengo momentos de alegría, de tristeza, de frustración, de miedo y actualmente momentos en los cuales sólo deseo una cosa, la "PAZ", la paz de un lindo sueño eterno... sin embargo hoy no tocaré ese tema, no, hoy no lo haré porque eso sólo forma parte de un sueño que he planeado en los últimos días.
Muchos se preguntaran, a qué viene todo esto?
Todo esto viene a que he llegado a un punto en el cual me he QUEBRADO a tal grado que me he dado cuenta que en aquellas personas en las que confié en algún momento, hoy no están aquí... pero no me deprime tanto como el hecho de continuar creyendo en los mismos ideales y no aprender de mis errores.
Sigo pensando que no hay personas MALAS, aunque así sea.
Sigo pensando que no hay personas EGOÍSTAS, aunque a menudo me encuentre con muchas de ellas.
Sigo pensando que no hay personas FALSAS, aunque bastantes de ellas me han hecho mucho daño.
Sigo pensando que NO HAY UNA MALA PERSONA EN EL MUNDO. Lo sigo pensando porque deseo creer en eso, porque si no creyera que es así, nada de lo que soy YO tendría sentido... No tendría sentido darle la mano a alguien sin conocerlo. No tendría sentido platicar de banalidades con alguien que sólo busca un consuelo. No tendría sentido dar segundas oportunidades a un enemigo que sólo hizo algo sin pensar. No tendría sentido AMAR aunque sepamos de ante mano que aquello es nuestra propia derrota.
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